Muchos le restan importancia al tipo de herramientas que utilizan para cortar las piezas de cerámica, sin embargo, de estas dependen los buenos acabados en el trabajo final.
Así como en la elección de una cortadora adecuada, debemos también tomarnos nuestro tiempo al escoger el tipo de disco, ya sea de trabajo en seco o en húmedo, según la magnitud del trabajo y el profesionalismo y perfección que este requiera.
Los discos de diamante por ejemplo, necesitan de agua para su correcto funcionamiento y refrigeración, dando como resultado unos cortes impecables y definidos.
Elija el tipo de disco
Tenga en cuenta que la elección de cada máquina y disco para corte, depende del tipo de material que se vaya a trabajar, ya que nos podemos encontrar con materiales abrasivos como ladrillos, gres, entre otros, así como materiales duros tales como el gres porcelánico o la pizarra.
Por esta razón, cada disco cuenta con una composición diferente que varía en función del tipo de material. Por ejemplo, para el corte de materiales abrasivos lo recomendable es usar discos que contengan menos partículas de diamante pero de mayor tamaño y soldadas en una liga de gran dureza.
Por su parte, los materiales duros requieren de discos con una mayor concentración de diamante, de menor tamaño y soldados en una liga de menor dureza con el fin de permitir la salida a la superficie del diamante.
Velocidad o calidad
Luego de elegir la herramienta y el disco correcto, debemos considerar el tipo de corte que vamos a hacer, teniendo en cuenta si queremos velocidad o calidad, ya que la mayoría de discos que nos aseguran buena calidad son más lentos y los que nos dan rapidez (especialmente si debemos hacer muchos cortes en poco tiempo) no nos aseguran una gran calidad en el corte.
Sin embargo, hay algunos que combinan tanto calidad como velocidad, permitiendo un trabajo ágil y con unos acabados perfectos.