En la publicación anterior hablábamos de los productos y procedimientos adecuados para la limpieza de superficies en concreto, algunos más agresivos que otros, dependiendo de la mancha o la suciedad a retirar.
En esta publicación, mencionaremos algunos procedimientos de limpieza y sus numerosas variantes.
Aunque algunos de estos procedimientos pueden ocasionar una pérdida de materia y degeneración del concreto, si se realizan de la manera correcta mantendrán intacta la superficie.
La limpieza a mano, por ejemplo, generalmente se realiza mediante cepillo o escoba o, para manchas más difíciles, vidrio celular o lija resistente al agua. Este procedimiento permite eliminar numerosas manchas pequeñas frotando con un cepillo duro no metálico (ya que las partículas finas de metal pueden ocasionar cambios de color), con piedra pómez fina o lija, o con vidrio celular. Es útil en las limpiezas por el método húmedo.
Otro procedimiento conocido es la limpieza por proyección, en la que se utiliza arena seca o húmeda, granos de diferentes tamaños, chorro de agua a presión (muchas veces combinado con arena), limpieza térmica o sopleteado con boquilla especial. Aunque es uno de los más agresivos, el sopleteado con arena, por ejemplo, permite la eliminación de numerosas impurezas que no han penetrado profundamente en la superficie, pulverizando y quitando las partículas de mugre; sin embargo, este procedimiento es poco apreciado ya que también provoca una pérdida de materia, volviendo la superficies rugosas y generando mucho polvo.
Igualmente, la limpieza mecánica se realiza con cepillo circular, fresas o discos; aunque es otro procedimiento agresivo, es útil para retirar manchas muy difíciles.
Por su parte, los procedimientos químicos de limpieza, permite eliminar ciertas manchas de la superficie del concreto, sin embargo, es necesario que sea realizado por especialistas, ya que un uso inadecuado puede provocar daños irreversibles tanto en el concreto como en las personas.
Los productos químicos pueden reaccionar de diversas maneras sobre el concreto. Generalmente, los productos alcalinos y los tensioactivos emulsionan las manchas permitiendo su fácil eliminación por lavado.